Resultados después de un mes escribiendo en Substack a diario

Bueeeeeeno.

Hoy la “era Substack” de esta newsletter cumple exactamente un mes.

Así que voy a dedicarle un ratillo a analizar visceralmente y en directo lo que ha pasado en estos 30 días, para ver si sacamos alguna conclusión interesante en cuanto a alcance, engagement y esas cosas.

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Este email será especialmente valioso para emprendedores que tengan cuenta en Substack.

Y que la estén utilizando para construir una audiencia.

Venga, vamos allá, que me empiezo a aburrir y quiero ir al turrón.

Esto que estás viendo arriba es el típico resumen de estadísticas que no se mete demasiado en profundidad en el tema.

Al hacer click en alguna de esos cuadraditos, entras en una nueva pantalla que te da más detalle del indicador que estás mirando.

Voy a ir ampliando y comentando uno a uno.

Y como sé que lo que más te gusta hacer en el mundo digital es medírtela para saber cómo de larga (la lista) la tienes, para luego mirársela a los demás y ver si les has ganado…

Empecemos con la evolución de suscriptores.

Esto es lo que ha pasado en estos últimos 90 días:

• En amarillo, fue el momento en el que me dediqué a pedir a la gente que tenía en mi lista de Substack que se fuera, porque iba a empezar a escribir en inglés.

• Mi idea era tener una lista en español (en Systeme), y duplicar el contenido, traduciéndolo, para pegarlo en Substack, y ganar suscriptores globales poco a poco.

• Me eché para atrás porque se me ocurrió moverlo todo aquí, y me cargué unos 30 suscriptores.

• En azul, el momento en el que hice efectiva la carga de la lista de emails que traía de Systeme, y que me hizo que esta de Substack pasara por primera vez de 600 suscriptores.

• He llegado al punto en el que estoy ahora (671 suscriptores) diría que entre 3-4 veces en estos tres años de newsletter diaria.

• El problema es que, hasta ahora, no había encontrado la manera de mantener un flujo estable de entrada de nuevos lectores.

• Y como escribo cada día y antes me centraba mucho en vender machacosamente en cada correo, pues mucha gente moría por el camino (y no entraban otros a reemplazarlos).

• Vamos, que llevo años llegando a los 700, para luego caer hasta los 400, y volver a subir de nuevo, para volver a caer…

• Nunca más.

• En rojo he marcado “la era Substack”, en la que se ve un crecimiento con el que estoy muy satisfecho (especialmente por lo que te contaba de que no encontraba la manera de estabilizar esto).

• En suscriptores netos, Siete Días está creciendo a 2 suscriptores al día.

• Suscriptores netos = los que entran - los que se marchan.

• No sé cómo se mira en Substack el número bruto diario de nuevos lectores, pero la verdad es que me da lo mismo porque solo me interesa el resultado final.

Esto es lo que ves cuando haces click en el botón “Suscriptores desde la App”:

• Ya, no cuadran los datos (en este he perdido 1 suscriptor), pero tiene que ver con movidas de Substack que no puedo controlar.

• En gris, los suscriptores que yo he importado, que son casi todos.

• En naranja oscurito, los que vienen desde la App (77), que son personas que entran “en orgánico” porque, de alguna manera, ven mi contenido en la app de Substack.

• En naranja intermedio, los que vienen de “Other Substack network”, que no tengo ni idea de qué es, pero que ha metido a 29 suscriptores.

• En naranja flojito, “Substack existing accounts”, que son personas con cuentas existentes de Substack (no sé la diferencia entre esto y los que entran por la app), que han sido un total de 32.

• Hay un 5% muerto de risa ahí en gris flojo, que son 5 héroes que llegan desde la calle (donde estoy haciendo exactamente CERO esfuerzos de captación) y crean cuenta en Substack.

Las de la derecha son las vistas de los últimos 30 días, que llegan a unas épicas 15.200 visualizaciones:

• Justamente hace dos días, vi un hilo de un señor en Substack que contaba que al mes estaba consiguiendo 7.000 visitas a sus posts (emails) porque tenía una lista de 2.000 personas, a las que escribía una vez a la semana.

• En el caso de Siete Días, con un tercio de esa audiencia (un 33% aprox), estoy consiguiendo más del doble de visualizaciones.

• Hablando claro: con una lista tres veces más pequeña que tu competidor, puedes pasártelo por la piedra fácilmente, y eclipsarlo por completo (y escribir 30 correos puede llevar el mismo tiempo, o menos, que lo que la mayoría dedica a escribir 4).

• Quien no lo quiera ver, que no lo vea, pero ahí arriba tienes una muestra de qué ocurre cuando te dejas de chorradas de “es que un email al día a mi gente no le gusta” y te dedicas a publicar más.

Y estas son las tasas de apertura, que la media se queda en 35.01%:

• No tengo mucho que decir aquí.

• Creo que la media es un poco mayor a la que tenía en Systeme (alrededor de 32%), pero mi ojo de loco me dice que me fíe poco de esa diferencia, no sé por qué.

• Suelo pasar bastante de la tasa de apertura (y del resto de métricas, para qué engañarte), pero con ese 35% estoy más que contento porque se sigue reforzando mi idea de que escribir menos para que te abran más es una capullada de niño bobo que aún sigue en el kindergarten del emprendimiento.

• Ahora saldrá alguno diciéndome que tiene una tasa de apertura del 80% con 50 suscriptores, y escribiendo una vez al trimestre, y que eso es porque están enganchados a su contenido, y me reiré bastante.

Y creo que ya está.

No sé qué más enseñarte, que acabo de hacer un barrido por todas las pestañas que tengo en el panel de control de Substack para ver qué captura puedo pegarte aquí.

Ah sí, sí, mira esta:

Es la Note (post corto como en cualquier otra red social) que más interacción ha tenido este mes:

• 38 likes, 4 comentarios, 12 restacks (que son como retweets en X)

• Creo que ha funcionado porque:

• Es un mensaje con el que todos los creadores en Substack se pueden identificar, y con el que pueden estar de acuerdo.

• Porque tiene una imagen, y eso siempre mola.

• Y porque indirectamente te está pidiendo que “compartas el contenido que te gusta”, y algunos harán exactamente esto con esta note.

• Substack no te dice de qué notes te vienen los suscriptores (deberían mejorar eso), pero estoy seguro de que han caído unos cuantos gracias a esta.

Ahora sí que sí.

Terminamos por hoy, camarada, que ya llevamos un rato mirándome los órganos.

Otro día me curro un email como este con menos fotos, y mis humildes, pero acertadas, recomendaciones para que cada día seas un poquito más feliz publicando tu newsletter.

Estés en Substack, o no.

Aunque, después de estos 30 días publicando a diario aquí dentro…

Te diría que le pegues una pensada a probar esto.

Que te entre gente en la lista casi en automático, sin tener web ni SEO (mi caso), ni ir a podcasts (llevo tiempo escondido sin querer que me entrevisten), ni participar en otras redes sociales, ni ir a eventos de ningún tipo…

Pues es para darle una vuelta.

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PD: Releyendo el email antes de enviarlo me di cuenta de que me faltó algo importante, y aquí está:

Estos tres cracks son los que más me han ayudado a crecer en estos 30 días, por tener a Siete Días como “newsletter recomendada” para sus audiencias:

• Mi hermano

  Samuel Domínguez
  , que tiene la mejor newsletter en español en Substack (así, tal cual suena).

• Mi colega

  Víctor Garcés
  , un crack en emprendimiento y finanzas, que además es mi referente en cuanto a todo lo que tenga que ver con nomadismo.

• Otro loco del email diario que conocí en Substack,

  Sixto Arias
  , que escribe guay y tiene entre 5-10 veces más experiencia que yo como emprendedor.

El resto de los de la lista, o ya no son activos en Substack, o acaban de empezar a recomendarme.

Pero los quiero igual.

:)

Gracias a todos por el empujón, las lecturas y las risas.

Salud.

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